¡Llegó la primavera!
Llevemos los colores del sol a nuestra boda. Para estos días soleados, ricos y excitantes nada mejor que decorar nuestra boda de ¡amarillo! Este color va de la mano con la alegría, la juventud y el buen humor. Es para las novias que no quieren pasar desapercibidas y desean que su boda sea inolvidable y ¡espectacular!
La primavera nos incita a realizar nuestra boda de día, para disfrutar del aire, del sol y de las flores. Toda la decoración deberá llevar el amarillo como base principal y lo podemos combinar con el blanco o con el color hueso para que quede un color más tenue, más jovial y mucho más energético.
El vestido de la novia, de las damas y los boutounnieres del novio y de los papás, la mantelería, las flores, las invitaciones y todo lo que utilicemos en nuestra boda pongámosle el color ¡Amarillo!
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